La Olympique de Marsella se presenta para enfrentar a Mónaco en un contexto favorable, con su reciente victoria contra el Club de Fútbol de Toulouse, y tratando de consolidar su segundo lugar en la clasificación. El partido, sin embargo, parece complejo para el equipo, con Roberto De Zerbi tratando con varias ausencias notables, incluyendo la de su capitán Balerdi. Aunque Gouiri y Hojbjerg están disponibles, su participación en toda la reunión está comprometida. Además, Luiz Felipe, que ha regresado recientemente a la formación, todavía no se considera adecuado para participar, destacando una persistente fragilidad debido a un largo período de inactividad.

En cuanto a la probable composición del equipo de Marsella, Rulli debe ocupar el puesto de portero. La defensa, si permanece alineada en tres jugadores, podría estar compuesta por Kondogbia, Murillo y potencialmente Hojbjerg o Cornelius. Se prevé que Quentin Merlin evolucionará en la estación de pistón izquierda, mientras que Luis Henrique debe ocupar el lado derecho. En medio del campo, Rongier debería acompañar a Ismaël Bennaacer, a menos que Hojbjerg tenga lugar, relegando a uno de los dos jugadores al banco. Rabiot, por su parte, debe conservar su papel híbrido en el lado izquierdo, mientras que Greenwood y Gouiri también tienen la posibilidad de ser titularizados.

Roberto De Zerbi expresó su preocupación por la capacidad del equipo de ser suficientemente fuerte en la defensa, destacando la necesidad de encontrar soluciones alternativas a ausencias y fragilidades persistentes. El entrenador tiene una ambición de victoria abrumadora, pero reconoce la realidad de las fuerzas implicadas y la importancia de valorar las cualidades de cada jugador, incluso si algunos no satisfacen sus expectativas iniciales. La composición del equipo, aunque es probable, sigue sujeta a cambios basados en circunstancias cambiantes y consideraciones tácticas.