La Olympique de Marsella se prepara para enfrentar a París Saint-Germain con una pequeña fuerza de trabajo y importantes incertidumbres médicas. Geoffrey Kondogbia está en duda por el shock, el sufrimiento de un problema de becerro, mientras que Nayef Aguerd es incierto debido al protocolo de conmoción. Además, el partido podría posponerse debido a tormentas en Marsella, aunque la prefectura confirmó que el partido continuaría si las condiciones meteorológicas empeoraran. A pesar de estos desafíos, el equipo se basa en el apoyo inquebrantable de sus partidarios, una fuerza impulsora esencial para el club, como señaló su entrenador Luis Enrique.
Antes del partido, Luis Enrique destacó la importancia del vínculo entre el equipo y los fans, destacando la energía y el apoyo que proporcionan, incluso en tiempos difíciles. Describió esta conexión como una fuente constante de motivación, que continuó a pesar de las derrotas en la Champions League. Esta proximidad a los partidarios se ve como un activo importante, especialmente en momentos en que el equipo domina el juego.
Al mismo tiempo, la atención se centra en el próximo Ballon d’Or 2025, que será presentado por France Football. El ex jugador de PSG Ronaldinho fue elegido para esta tarea simbólica, un guiño a su pasado glorioso en el club de París. Por su parte, Luis Enrique ha designado con humor a Ousmané Dembélé como su favorito, destacando su evolución y su creciente talento. Esta respuesta inesperada refleja su estilo y afecto por el joven jugador.