Olympique Lyonnais enfrenta una serie de problemas financieros y legales. Además de las dificultades actuales asociadas con la transferencia de Jeffeerson Savarino, por las que Botafogo reclama 64,6 millones de euros, el club también se enfrenta a complicaciones con el DNFG en relación con la integración de algunos jugadores. Esta situación se ve agravada por la amenaza de Botafogo de llevar el asunto a la justicia si el pago no se hace dentro de 30 días. A pesar de estos desafíos, OL sigue reclutando con la llegada de Pavel Šulc y Tyler Morton, fortaleciendo así su fuerza laboral para la próxima temporada.
En paralelo, el equipo se está preparando activamente para la recuperación del campeonato. Malick Fofana reanudó el entrenamiento colectivo después de un choque en la cabeza, pero su futuro en el club sigue siendo incierto debido al creciente interés de Everton. Nicolas Tagliafico, recientemente extendido, busca tranquilizar su condición física antes del comienzo de la temporada. OL también se están preparando para su último partido amistoso contra el Getafe, un último ensayo antes del comienzo de la Liga 1.
La llegada de Pavel Šulc marca un impulso importante para el midfielder de Lyon, uniendo una galaxia de jugadores checos que han marcado la historia del club. Este recluta forma parte de una estrategia para fortalecer la fuerza de trabajo, a pesar de las restricciones financieras y numerosas salidas de verano. OL, bajo la dirección de Paulo Fonseca, se esfuerza por reconstruir un equipo competitivo mientras navega en un contexto económico y jurídico complejo.