AS Saint-Étienne celebró una victoria de 4-0 sobre Rodez en el estadio Geoffroy-Guichard, un éxito que evoca las veladas gloriosas en Chauron. Esta actuación, marcada por una demostración ofensiva y fuerza defensiva, revivió el entusiasmo de los fans después de una espera de tres meses. Joshua Duffuss abrió la partitura, seguido de los objetivos de Jaber, Cardonaet y Davitashvili, sellando una victoria clara e indiscutible que marcó un punto de giro positivo para la temporada de Stéphanois, después del sorteo inicial en Laval. La atmósfera en el Chauron era eléctrica, reflejando la fuerza e inspiración del colectivo.

Este 4-0 contra Rodez resuena con un precedente histórico: el 12 de febrero de 2017, el ASSE ganó la misma puntuación contra Loriens, en un partido que sirvió como una preparación ideal antes de un viaje a la Europa League en Manchester United. Esta victoria de 2017, cuando Loïc Perrin, Jordan Veretout, Romain Hamouma y Jorginho anotó, simbolizaron un tiempo cuando ASSE aspiraba a competir en competiciones europeas. Más recientemente, el 16 de marzo de 2024, el equipo también había ganado un 4-0 fuera contra Bastia en Ligue 2, una victoria crucial que había impulsado a los Stéphanois a la carrera de escalada Ligue 1.

La capacidad del ASSE para marcar metas con tal consistencia, tanto en el hogar como en el exterior, es un signo de dominación técnica y táctica, así como un reflejo de un estado mental colectivo restablecido. Este 4-0 contra Rodez, como las victorias de 2017 y 2024, simboliza un equipo capaz de anotar mentes y ambicionar el primer papel en la Liga 2. Ahora es necesario confirmar esta dinámica positiva durante los próximos días para que este éxito no sea un simple fuegos artificiales de verano, sino la señal de una temporada de victoria sostenible.