L’Olympique de Marsella está poniendo en marcha una estrategia para reconstruir su fuerza de trabajo para la temporada 2025-2026. Se tomó una decisión interna importante, con la creación de un “izquierda” para los jugadores considerados no esenciales para el proyecto. Varios jugadores, entre ellos Ruben Blanco, Bamo Méïté y Azzedine Ouahi, fueron informados individualmente e invitados a unirse al Team Pro 2, supervisado por Romain Ferrier. Esta medida tiene por objeto facilitar su salida y reducir el número de nuevos reclutas, como parte de un mercato de verano animado. El objetivo es tener una mano de obra más pequeña, involucrada y adaptada a los requisitos tácticos del entrenador Roberto De Zerbi.
El club de Marsella también se centra en fortalecer su entorno de campo. El futuro de Valentin Rongier es incierto, lo que podría impulsar a OM a colocarlo en el mercado de transferencia y buscar un reemplazo. Ezequiel Fernaandez, argentino de 22 años, es una vía reactivada, con la Sociedad Real también interesada. OM tendrá que ser convincente en términos deportivos y financieros para apoderarse de este jugador, que podría satisfacer las necesidades tácticas de De Zerbi.
Por último, la OM continúa su labor de refuerzo defensivo, especialmente en el lado izquierdo. Después de las llegadas de CJ Egan-Riley y Facundo Medina, el nombre Romain Perraud, lado de la Betis de Sevilla, resurfaces. OM podría ofrecer un intercambio incluyendo a Pau López, que dejó el club para Toluca. El caso es seguir, con un potencial acelerador si un club inglés hace una oferta concreta para Quentin Merlin, otro jugador defensivo al principio.