A pesar de una temporada que no resulta ser brillante, el equipo de RC Lens está mostrando una dinámica alentadora, habiendo registrado tres victorias en los últimos cuatro días de Ligue 1, incluso superando el rendimiento de clubes como Olympique de Marsella, OGC Nice y LOSC. Si una calificación europea sigue siendo matemáticamente posible, ya no se considera un objetivo prioritario por el liderazgo lensiano. La atención se centra ahora en la conclusión de la temporada actual en las mejores condiciones posibles, mientras que al mismo tiempo se inicia la preparación del próximo ejercicio, lo que implica una rotación de la fuerza de trabajo que favorezca a los actores integrados en el proyecto a largo plazo.

El ataque Lens se ve afectado por cambios, en particular con M’Bala Nzola, quien, siguiendo una sanción disciplinaria, podría ser relegado a la banca de los sustitutos. El equipo estará atento a la actuación de algunos jugadores, incluyendo Goduine Koyalipou, cuya actuación general se considera decepcionante a pesar de su objetivo contra AS Saint-Etienne. Se espera que el juego contra el Stade de Reims sea crucial, sobre todo porque este último se moverá con una defensa considerablemente debilitada, siendo suspendido Cédric Kipré y Joseph Okumu herido.

El Estadio Reims, privado de sus principales jugadores en defensa, tendrá que depender de alternativas, incluyendo Abdoul Koné, poco utilizado esta temporada, y Malcolm Jeng, recluta de invierno. Luka El sucesor interino de Elsner podría considerar una reposición estratégica de Mory Gbane, un medio defensivo. Dada estas circunstancias, RC Lens tiene una oportunidad favorable para ganar y alcanzar el objetivo de 51 puntos, asegurando un final más sereno de la temporada.