El AS Monaco sufrió una derrota devastadora contra el Club Brujas en la Champions League, cayendo en la puntuación de 4 a 1. Esta actuación provocó una fuerte crítica de Daniel Riolo, periodista deportivo, que denunció una total falta de actitud y calidad de juego del equipo monegasco. Riolo expresó su decepción en este nivel de juego, destacando la falta de pases y una actitud resignada de los jugadores. También envió un mensaje a la dirección del club, en particular al director deportivo Thiago Scuro, cuestionando la capacidad del equipo de replicar los éxitos del entrenador Adi Hütter y calificando la actitud de los jugadores como “designación”. A pesar de esta derrota, el único punto positivo para Mónaco es la entrada de Ansu Fati, un novato de verano, que marcó su primer objetivo con el club. Esta actuación fue elogiada por el director deportivo y defensor Eric Dier, quien expresó su satisfacción con la integración del joven jugador.
Thiago Scuro, director deportivo de AS Monaco, expresó su profunda decepción al nivel de rendimiento de su equipo durante el partido contra Brujas. Describió la derrota como “shocking” y reconoció que el equipo había sido dominado en gran medida, señalando una falta de preparación y organización. Scuro asumió la responsabilidad colectiva de esta derrota, incluyendo el entrenador, el personal y los jugadores, e insistió en la necesidad de aprender de esta experiencia para evitar repetir los mismos errores. También expresó su tristeza por la decepción de los partidarios y destacó que esta derrota no reflejaba la imagen del fútbol francés. Insistió en que no había posibles excusas y que el juego debía ser analizado para encontrar soluciones.
Más allá de la derrota deportiva, el rendimiento de Mónaco provocó una ola de crítica amarga de la gestión del club. Los observadores denuncian una estrategia de contratación centrada en los jóvenes con alto potencial, pero cuyo éxito no está garantizado, a expensas del aumento de la fuerza y la estabilidad del personal. La política de ventas presentada por el Presidente y el Director del Deporte, aunque se presenta como una necesidad financiera, se considera una falta de visión a largo plazo. La falta de avances significativos en las estaciones, a pesar de las promesas de mayor rendimiento, alimentó la frustración. La derrota contra Brujas se ve como la gota de agua que desborda un jarrón, y se escuchan muchos llamados a una gran limpieza del club, comenzando con la salida del presidente, el director deportivo y el entrenador.