Niza creó la hazaña imponiendo (3-1) en el Parc des Princes contra un PSG dominante gracias a una defensa heroica y un Marcin Bulka imperial. El entrenamiento de Franck Haise fue decisivo, con un tercer objetivo firmado por Santamaria que sella una victoria histórica. Es un PSG hambriento que quiere demostrar que está listo para la semifinal de la Champions League la próxima semana contra Arsenal que acogió esta noche el GOC Nice en el Parc des Princes. Un París destructivo y conquistador, que podría haber terminado la primera mitad en una fuerte puntuación de al menos 4 a 5 goles si Niza no tenía en su personal defensores de la mente del acero, atacantes incisivos, pero sobre todo un portero de clase mundial en la persona de Marcin Bulka. De hecho, el internacional polaco logró detener el 99% de los ataques parisinos, tanto que nos preguntábamos cómo iban a destruir esta tela de araña tejida por el increíble Bulka y su defensa. Reagrupados como valientes guerreros en sus últimos cortes, los defensores Niçois parecían jugar el juego de sus vidas, negándose a bajar las armas y marcar la bandera blanca. Aún mejor, esta creciente solidaridad terminó dando al ogro parisino el deseo de responder y sorprenderlo con contraataques progresivos en el campo opuesto, ganando metro tras metro espacio. Los esfuerzos generales recompensados por un objetivo de toda belleza de Morgan Sanson, sirvieron magistralmente desde fuera del pie izquierdo por la joven internacional argelina Badredine Bouanani (0-1). El GOC Nice podría estar orgulloso de haber hecho mejor que resistir al gigante parisino que el más grande de Europa podría haber hecho. La igualdad de Fabian Ruiz (41’) tanto más lógica, no se enfría, de ninguna manera el ardor de los Niçois que encenderá la segunda mitad por una acción colectiva magnífica puntuada por un segundo objetivo de Morgan Sanson (46’) que permanecerá mucho tiempo en memoria. Una espléndida recuperación acrobática de media mosca del pie derecho después de un centro perfecto de Jonathan Clauss en el lado derecho (1-2) para poner en duda un poco más París y ganar la apuesta por la carrera de podio Ligue 1. Durante los minutos, sentimos que los Aiglons ganan un poco más en la fuerza defensiva, pero también de la confianza ofensiva. Todo se hizo posible entonces en la cabeza de los foles de Franck Haise que ahora arrojó estrellas parisinas. El rigor defensivo de los Aiglons terminó desestabilizando a los jugadores de PSG pero también su entrenador! Luis Enrique se vio obligado a hacer cuatro cambios importantes. Dos en el momento del juego primero, sacrificando Doué y Joao Neves (sustituido por Bradley Barcola y Zaire-Emry), luego diez minutos después, Ousmane Dembélé y Marquinhos (para Gonçalo Ramos y Lucas Beraldo), probablemente en previsión del partido contra Arsenal, pero principalmente porque su contraparte de Niza tuvo un aborto