Ante las dificultades encontradas por la Olympique de Marsella, los órganos rectores del club están decididos a no atribuir responsabilidad por los resultados decepcionantes al mercado de transferencia. Decididos a afirmar su posición, los líderes señalan que las decisiones tomadas durante los últimos períodos de reclutamiento, ya sea invierno o verano, no deben ser cuestionadas. Destacan el ejemplo del Real Madrid, habiendo superado una media temporada marcada por la falta de disponibilidad de varios actores clave en defensa, para seguir ganando victorias, para justificar su enfoque y demostrar la posibilidad de superar obstáculos.
Los responsables de las decisiones de Marsella insisten en que el equipo actual no tiene una calidad inferior a la de hace seis meses, diciendo que las lesiones y las ausencias no deben usarse como pretexto para ver el rendimiento de los dientes. Destacan la importancia de la mentalidad, organización y profundidad del banco como factores determinantes del éxito deportivo. Según ellos, la fuerza de trabajo sigue siendo competitiva y cohesión, confianza y estrategia serían los elementos a ajustar, en lugar de la calidad intrínseca de los jugadores.
Por último, para preservar la serenidad dentro del grupo y evitar cualquier búsqueda de chivos expiatorios, los líderes son categóricos: el mercado de transferencia no será señalado. Esta postura tiene como objetivo proteger la unidad del equipo y mantener una dinámica positiva en vista de los plazos cruciales que se aproximan, consolidando así un enfoque centrado en la responsabilidad colectiva y la confianza en el potencial de la Olympique de Marsella.