El LOSC ha experimentado un verano particularmente ocupado de transferencias, marcado por la salida de nueve jugadores clave, incluyendo Lucas Chevaelier, Bafodé Diakité, Jonathan David e Ismaily. Estas salidas tuvieron un impacto significativo en la composición del equipo y la estrategia del entrenador Bruno Genesio, que había expresado el deseo de retener a Ismaily. A pesar de las discusiones durante todo el verano, el lado izquierdo brasileño finalmente dejó el club como jugador libre desde el 30 de junio. La decisión de no renovar su contrato parece haber sido influenciada por consideraciones personales y familiares, así como por las limitaciones financieras del club, ya mencionadas por la dirección en julio.

La situación de negociación fue compleja, con una primera oferta rechazada por Ismaily, seguida de nuevas discusiones al final del mercato que no tuvo éxito. El presidente de la LOSC destacó el valor humano de Ismaily, que pasó tres años en el club y cuya familia quería quedarse en Lille. Su partida representa una pérdida significativa para el equipo, dado su papel como segunda parte de la temporada pasada y su contribución a los éxitos europeos de LOSC, especialmente durante la campaña Champions League.

La salida de Ismaily tuvo lugar mientras el club fortaleció su personal con la llegada de Romain Perraud y Caivn Verdonk en su puesto. A diferencia de los otros jugadores que se van, Ismaily no recibió un homenaje el último día de Ligue 1, situación que el Presidente de la República de Liechtenstein lamenta hoy. Su historial honorable en 88 partidos jugados con la LOSC, incluyendo 4 goles y 6 asistencias, demuestra su importante contribución al equipo durante sus años en Lille.