El Racing Club de Lens está pasando por un período de reestructuración financiera y deportiva, que requiere una reducción significativa en la nómina de sueldos. Por lo tanto, varios elementos de la fuerza de trabajo, incluidos los salarios más sustanciales, deben quedar excluidos durante el próximo mercato de invierno. Entre los jugadores involucrados se encuentran perfiles como Facundo Medina, cuyo curso parece estar llegando a su fin dentro del club, M’Bala Nzola, cuya opción de compra no se activará, Angelo Fulgini, cuyo compromiso carece de convicción, Anass Zaroury, cuyo rendimiento es decepcionante, y Nampally Mendy, que ya fue blanco para un comienzo del invierno pasado. Esta purga probablemente conducirá a una nueva reorganización del equipo liderado por Will Still, especialmente cuando los jugadores actualmente en préstamo volverán.

La situación de Salis Abdul Samed, un centrocampista internacional de Ghana, plantea una cuestión importante. Un elemento esencial del esquema de Franck Haise durante la temporada 2022-2023, que había sido concluido por un honorable segundo lugar detrás de París Saint-Germain, fue prestado esta temporada a Sunderland después de un año decepcionante 2023-2024. Este préstamo, lejos de ser concluyente, se vio obstaculizado por problemas musculares recurrentes, evitando que el jugador se integre plenamente en el equipo. Por lo tanto, el club inglés parece no querer ejercer su opción de retenerlo.

El regreso de Salis Abdul Samed a Lens plantea la cuestión de una posible reventa o un nuevo préstamo. Dado su año casi blanco, las ofertas deben ser limitadas. Por lo tanto, los Lens RC podrían verse obligados a mantenerlo, una solución predeterminada que podría, sin embargo, ser sorprendente. Para ello, el jugador tendrá que volver al camino del rigor y mostrar un profesionalismo renovado, su higiene de vida habiendo sido cuestionado previamente.