En los cuartos de final de la Copa Mundial del Club, París Saint-Germain (PSG) ganó una significativa victoria sobre Bayern Munich (2-0) en Atlanta, Georgia. El juego, intenso y marcado por un momento dramático, vio al PSG superar las dificultades y clasificar para las semifinales. La victoria se celebró con entusiasmo, destacando la determinación y el valor del equipo, que tuvo que jugar en inferioridad numérica durante parte del juego. Désiré Doué, un activista o atacante de PSG, expresó su satisfacción después del juego, destacando la importancia de esta cualificación.

Sin embargo, el encuentro fue empañado por una lesión grave a Jamal Musiala, el atacante estrella de Bayern Munich. Un choque involuntario con Gianluigi Donnarumma, el portero PSG, resultó en una fractura de tobillo para el jugador alemán, terminando su participación en la competición. Ashraf Hakimi, defensor del PSG, expresó su apoyo a Musiala, destacando la gravedad de la lesión y esperando una pronta recuperación. A pesar de este evento, el PSG logró recuperar y mantener su enfoque en el juego, demostrando impresionante fuerza mental.

La calificación para las semifinales, que tendrá lugar el 9 de julio contra el ganador del partido Real Madrid - Borussia Dortmund, es el resultado de un esfuerzo colectivo y una notable resiliencia. El equipo de Luis Enrique ha mostrado un enorme corazón y una capacidad para trascender en tiempos difíciles. Las actuaciones individuales de varios jugadores, incluyendo Donnarumma, Hakimi, Marquinhos y Doué, fueron alabadas. Esta victoria sugiere un inmenso potencial para el PSG, capaz de competir con los mejores equipos del mundo y continuar su búsqueda por el título mundial.