El miércoles por la noche, el Arsenal superó el Real Madrid, asegurando su calificación para las semifinales de la Champions League y uniéndose a París Saint-Germain. Esta victoria inglesa, aunque se celebra, arroja una sombra sobre el entusiasmo parisino, especialmente porque la reciente actuación del equipo contra Aston Villa no permitió una completa alegría en esta segunda clasificación consecutiva para la próxima ronda. Se señala ahora la siguiente confrontación contra el Arsenal, generando esperanza y aprensión entre los partidarios parisinos.
A pesar de una temporada impresionante y los éxitos recientes contra clubes ingleses, las ambiciones de París Saint-Germain son inquietantes. De hecho, de siete partidos contra clubes franceses en la fase final de las competiciones europeas, el Arsenal registró seis victorias, un resultado particularmente desfavorable para Ligue 1. Esta dominación histórica de los Gunners contra los equipos franceses ha desalentado a muchos contendientes, incluyendo Lens, Nantes, Auxerre e incluso París, todos los cuales han sido derrotados.
Sólo Mónaco logró romper esta supremacía en la temporada 2014-2015, calificando para los cuartos de final de la Champions League gracias a una doble victoria contra los londinenses. Esta hazaña ofrece un brillo de esperanza para los parisinos, que están alimentando la ambición de competir en su segunda final de la Champions League este año, aunque la subida hacia este objetivo promete ser ahogada contra un oponente formidable e histórico.