En el contexto crucial del partido de regreso contra Manchester United, varios jugadores de Lyon están bajo amenaza de una posible suspensión para una posible semifinal Europa League. Alexandre Lacazette, Corentin Tolisso, Ainsley Maitland-Niles y Moussa Niakhaté tendrán que ser cautelosos en esta reunión, ya que ya han sido advertidos varias veces durante la competencia. Esta delicada situación, que se repitió durante el partido va al Parc OL, requiere un riguroso manejo de sus emociones y un control impecable de sus intervenciones, para no comprometer las esperanzas de Olympique Lyonnais.
La vigilancia es tanto más necesaria como Nicolas Tagliafico, también amenazado, arriesga una nueva suspensión. Después de una tarjeta amarilla recibida durante el juego de redondeo, acumulaba cuatro advertencias durante esta campaña C3, habiendo ya llevado a una suspensión contra Fenerbahçe. La regulación de la UEFA, que prohíbe a un jugador participar en un partido con un número impar de tarjetas amarillas después de tres advertencias, añade presión adicional sobre estos jugadores esenciales al dispositivo de Paulo Fonseca. La ausencia del argentino, particularmente exitosa e influyente durante el partido de ida y vuelta, sería un revés significativo para el equipo.
Afortunadamente, la regulación prevé la reordenación de metros en caso de calificación para las semifinales. Esta medida, diseñada para no penalizar los clubes que progresan en la competencia y aspiran a una posible final, ofrecería a estos jugadores la oportunidad de empezar desde cero, liberado de la presión de las tarjetas acumuladas durante la fase de pollo. Por lo tanto, tendrán que navegar con finura entre la necesaria agresividad y la precaución necesaria para preservar sus posibilidades de participar en las etapas posteriores de esta competencia europea.