La Olympique de Marsella mostró un gran interés en Kobbie Mainoo, un joven centrocampista de Manchester United, especialmente motivado por el hecho de que se dispusiera de más tiempo de juego antes de la Copa Mundial 2026. A pesar del interés de varios clubes europeos, incluyendo RB Leipzig, OM se enfrenta a una posición firme de Manchester United. El entrenador estadounidense Rúben Amorim dejó claro que el club quiere mantener Mainoo y que tiene que luchar por su lugar, una posición que complica las perspectivas de un préstamo inminente o transferencia. La llegada de Roberto De Zerbi a OM planteó esperanzas para un reclutamiento de Mainoo, De Zerbi disfrutando del potencial creativo del jugador, pero las declaraciones de Amorim hacen que este escenario sea menos probable. El club de inglés está a favor de una extensión de contrato para Mainoo, para verlo ganar gradualmente en la Premier League.

Al mismo tiempo, OM participa en un complejo caso contractual que involucra a Edon Zhegrova, ala de LOSC. El presidente de LOSC, Olivier Létang, expresó su sorpresa y enojo ante los rumores de un acuerdo entre OM y Zhegrova, destacando el incumplimiento de las normas que rigen las transferencias y la necesidad de ponerse en contacto con el club en posesión del contrato. The pond even alleged that Roberto De Zerbi had contacted Zhegrova directly, which highlights a delicate situation for the LOSC, which insists on compliance with official procedures. Este caso pone de relieve la sensibilidad de las negociaciones del mercato y la importancia de cumplir con las normas de la FIFA.

En preparación para el viaje de OM a Lyon, el entrenador Roberto De Zerbi enfrenta varias ausencias importantes del equipo. Medina, Kondogbia y Paixão no están disponibles, mientras que Harita ha reanudado el entrenamiento colectivo. Estas ausencias pesan en el equipo, especialmente en términos de rotación de rango medio y opciones defensivas. A pesar de estas dificultades, De Zerbi prefiere centrarse en las fortalezas disponibles y esforzarse por encontrar soluciones para mantener el equilibrio del equipo. El partido dominical en Lyon es un reto crucial para OM, que debe ser adaptable y resistente a estas limitaciones.