Olympique Lyonnais está actualmente en medio de la reconstrucción, tratando de llenar la brecha que deja la salida de Lucas Perri. El club explora diversas opciones para la posición del portero, oscilando entre la adquisición de nuevos talentos y el desarrollo de jóvenes jugadores desde su formación. Inicialmente Lorenzo Torriani había sido considerado, pero esta pista finalmente falló. La dirección de Lyon también está estudiando la posibilidad de confiar el maillot número uno a Mathieu Patouillet, un prometedor joven portero pero todavía considerado inexperto para una temporada completa en Ligue 1. La próxima llegada de Ruben Kluivert, defensor central holandés, es prueba de este deseo de aumentar el número de jugadores, mientras que la salida de varios jugadores, incluyendo Adryelson y Jordan Veretout, abre oportunidades para recién llegados.
En paralelo con estos movimientos a nivel del primer equipo, OL realiza cambios significativos en su organización interna. El personal técnico de la Academia fue revisado con la llegada de Jonatan Giraldez, con el apoyo de asistentes del Espíritu de Washington. Rachel Saïdi se encargará de Laurie Dacquiña como jefe del centro de formación, asegurando la continuidad del proyecto académico. Estos cambios son parte del deseo de modernizar e impulsar el entrenamiento de jóvenes jugadores, al tiempo que honran el trabajo de quienes contribuyeron a la historia del club.
Finalmente, OL se moviliza para fortalecer su entorno de campo, con un fuerte interés para Pierre Lees-Melou, un experimentado mediocampista que actualmente opera en Brest. Este jugador, que ha participado en la calificación histórica de su equipo en la Champions League, podría ser una solución ideal para llenar los últimos comienzos y traer una experiencia valiosa al equipo. Se espera que las negociaciones con el club de Breton se intensifiquen en los próximos días, y que se pueda llegar a un acuerdo, lo que permite a OL consolidar su personal y continuar su progreso.