El entrenador de Olympique Lyonnais Paulo Fonseca se enfrenta a un dilema táctico al elegir su punto medio para el partido de regreso contra Manchester United. Aunque la experiencia de Nemanja Matic es innegablemente valiosa, especialmente después de una actuación inesperada de Paul Akouokou durante todo el partido, donde fue lanzado para tratar de contener Bruno Fernandes, el entrenador portugués oscila entre estas dos opciones. El Côte d ’ Ivoire, que había estado ausente durante más de 18 meses, se había sorprendido por su compromiso, pero su contribución se limitaba a 49 minutos de juego. Fonseca expresó admiración por Akouokou, destacando su actuación contra los Diablos Rojos, pero este reconocimiento no garantiza una nueva tenencia en Old Trafford.
Frente a esta incertidumbre, Fonseca podría preferir la experiencia de Matic, a pesar de cierta lentitud que le había llevado a ser dejado en el banco durante el juego go. La elección de un jugador que había jugado tres finales de Europa League de nuevo sería una apuesta audaz. Una configuración potencial vería a Matic asociado con Jordan Veretout, para inyectar velocidad e intensidad en el juego de Lyon. Más allá de esta pregunta central, el entrenador parece reacio a remodelar significativamente su once original, dada la fuerza mostrada por OL en las últimas semanas.
Finalmente, la probable composición del equipo de Lyon sugiere una continuidad en el dispositivo, con Perri en las metas, Maitland-Niles y Tagliafico a los lados de la defensa, y una animación ofensiva liderada por Mikautadze en el borde de corte, dejando a Alexandre Lacazette en reserva para traer energía y experiencia en el curso del partido, como Malick Fofana, también de vuelta pero falta de aptitud física. La presencia de jugadores como Cherki, Toliss y Almada completaría el juego, ofreciendo a Fonseca una gama de soluciones tácticas para abordar este juego crucial.