Pre-temporada es un momento crucial para los jugadores que buscan afirmarse dentro de su club. Para Lamine Fomba en ASSE, esta fase podría ser decisiva después de dos años y medio de intentar ganar. Reclutado en 2023, el mediocampista se había distinguido rápidamente como un jugador valioso, coincidiendo con la recuperación del club y su retención en Ligue 2. Sin embargo, la llegada de nuevos jugadores bajo los sucesivos entrenamientos de Laurent Batlles y Olivier Dall’Olio complicó su situación, reduciendo su tiempo de juego. A pesar de una presencia regular en el grupo, ayudó a promover ASSE en Ligue 1 durante la presa contra Metz, obteniendo una extensión de contrato hasta 2026.

ASSE, bajo la dirección de Kilmer Sports Ventures, ha emprendido una revisión importante de su organización para garantizar un retorno sostenible a Ligue 1. Esta estrategia se centra en la contratación, el refuerzo del personal y la modernización de la Dependencia de Exploración. El objetivo es evitar las decisiones a corto plazo y construir una fuerza de trabajo equilibrada capaz de satisfacer las demandas de Ligue 2 mientras se prepara para el futuro. La Célula Scout fue reestructurada con la llegada de Alexandre Lousberg como coordinadora, con el objetivo de mejorar la recopilación y análisis de datos para opciones de reclutamiento más informadas.

En paralelo con estos cambios, el personal técnico también se ha fortalecido considerablemente, con más de 200 entrevistas realizadas para formar un equipo de especialistas en Eirik Horneland. Se hace hincapié en la colaboración e integración de diferentes áreas como rendimiento, desarrollo individual, nutrición y psicología deportiva. La ambición es proporcionar a los jugadores un entorno estructurado para promover su progreso y alcanzar todo su potencial, permitiendo a ASSE recuperar su lugar entre la élite del fútbol francés.