ASSE persigue activamente la modernización de su reclutamiento, aprovechando la llegada de Alexandre Lousberg en la unidad de reclutamiento y la integración de varios nuevos perfiles. Nombres como Pedro Ferreirinha, Guillaume Leleu y Uli Schier se unieron al equipo, cada uno con experiencia específica y valiosas redes de contacto. Según análisis recientes, estos nuevos reclutas deberían permitir que el ASSE explore nuevos mercados y encuentre talento que el club todavía no había identificado, un enfoque particularmente relevante en el contexto actual de una crisis en el fútbol francés.

La estrategia de reclutamiento de ASSE, criticada desde hace mucho tiempo, está bajo una nueva dirección bajo la dirección de Kilmer, que busca romper con el pasado y construir una base sólida para el futuro. El objetivo es desarrollar bases de datos de reproductores robustas, lo que permite la vigilancia y ampliación a largo plazo del área de prospección. Este enfoque, que se centra en la paciencia y el pragmatismo, tiene por objeto alejarse de los errores pasados y garantizar un paso adelante de la competencia.

Aunque los resultados concretos no son inmediatos, la llegada de estos nuevos actores y la ampliación del área de prospección sugieren efectos positivos a mediano y largo plazo. La capacidad de identificar y negociar con los jugadores, especialmente los que viven en el extranjero, depende de la presencia de personas sobre el terreno, dominando el idioma y conociendo a los agentes. El ASSE por lo tanto tiene un largo camino por recorrer, pero las primeras señales sugieren que está en el camino correcto para encontrar Ligue 1.

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