Paris Saint-Germain (PSG) se prepara para enfrentar a Chelsea en la final de la Copa Mundial de Clubes, un evento que podría marcar un punto de inflexión histórico para el club parisino. El equipo, después de una temporada excepcional coronada con cuatro títulos nacionales y la victoria en la Champions League, pretende ganar un quinto trofeo. Los jugadores, aunque cansados después de un año intenso con 64 juegos jugados, muestran confianza palpable y determinación para escribir una nueva página en la historia del club. Las declaraciones de Désiré Doué, mediocampista del PSG, subrayan la importancia de esta última y la voluntad colectiva de ganar el título. El equipo, liderado por Luis Enrique, se basa en una impresionante cohesión y fuerza colectiva para competir con los mejores clubes europeos.
Los observadores y compañeros de equipo acogen con beneplácito el tremendo progreso del PSG esta temporada, en particular la eficacia ofensiva y la capacidad de tomar el liderazgo en los juegos. Arsène Wenger, ex gerente de Arsenal, destaca la intensidad y capacidad del equipo para hacer una diferencia desde los primeros minutos, destacando el impacto de la limpieza y tácticas secas. Se destaca especialmente la actuación de jugadores como Dembélé, Barcola y Doué. En los márgenes de esta final, se están discutiendo sobre la extensión del contrato de Gianluigi Donnarumma, el portero, con el PSG que desea finalizar esta cuestión después de la competencia para no interrumpir el equilibrio del equipo.
La FIFA nombró a Alireza Faghani, un árbitro iraní experimentado, para dirigir la final entre PSG y Chelsea. Faghani, 47 años, es reconocido por su autoridad, discreción y rigor en la gestión del juego. Esta designación forma parte del deseo de la FIFA de promover referencias de diferentes confederaciones, reflejando la creciente globalización del fútbol. El PSG tendrá que adaptarse rápidamente al estilo de arbitraje de Faghani, que ya ha participado en prestigiosos torneos como las Copas Mundiales 2018 y 2022, así como los Juegos Olímpicos 2016.